Un país como México en un año puede albergar más de 300 mil eventos, exposiciones y convenciones, con la pandemia la industria se vio severamente afectada porque hubo un freno total, más de 300 ferias se cancelaron y tan solo entre marzo y abril de 2020 la pérdida para el sector fue de 90 millones de dólares.
Si algo afecta al sector médico es la falta de espacios para que desarrollen su actividad, se ha creado una dinámica en la que trabajar en hospitales o clínicas es cada vez más difícil por temas de influencias y plazas porque la demanda supera por mucho a los lugares donde los profesionales de la salud pueden desarrollar su actividad.
El mundo educativo no tiene límites, eso lo hemos visto en muchos casos y cada época de la historia de la humanidad, pero a veces hay contextos en los que se vuelve todo un reto poder difundir a más personas un tipo de conocimiento.
El cambio digital ha detonado grandes modificaciones en el ámbito de los negocios y uno de estos tiene que ver con la necesidad de contar con espacios de interacción en la red, ya que cada vez es más dinámico el ambiente laboral, profesional y comercial.
En la nueva normalidad se van activando paulatinamente algunos sectores, pero si hay un aspecto que tardará y realmente no recuperará su esencia de ser (por lo menos en un largo plazo) son las actividades que impliquen aglomeración de personas.
Toma en cuenta que si no realizas acciones en tu negocio, el cambio digital continúa, evoluciona con o sin ti, y las empresas que no se adapten y sean flexibles perderán hasta extinguirse.
Uno de los sectores que más han sufrido los efectos de la pandemia es el educativo, muchas escuelas han cerrado porque no obtuvieron inscripciones, pero por igual es uno de los giros que tiene una opción a la mano con la que pueden darle una vuelta a la situación y convertir la adversidad en una oportunidad.
Hace una década todavía podíamos ver a lo digital como una opción más en la que un negocio podría tener influencia, hoy esto ha cambiado de forma radical, ya no hablamos de tendencias, sino de una realidad: todo está en digital.
