Aunque el Coronavirus ha afectado absolutamente todo en el mundo, es real que el impacto es distinto dependiendo de cada sector. Así que cada industria o ámbito debe tomar medidas para adaptarse, lo que no es opción para nadie es la inacción.
El mundo busca sobrevivir al Covid-19, las medidas establecidas por cada país tienen como prioridad la salud, aunque los planes de contingencia impacten la cadena productiva, procesos de trabajo, el empleo, la cadena de suministro, operaciones y hasta los hábitos más individuales.
En este panorama de incertidumbre en la economía global y merma en las finanzas personales, lo que se requiere es la REACTIVACIÓN. Algunas naciones ya comenzaron con este proceso, aunque las medidas sanitarias continuarán. En otros países se sigue bajo una parálisis y mientras se dice que ahora sí en junio habrá luz verde para algunos segmentos, en realidad no se sabe si será julio o agosto.
Ya hubo tiempo suficiente para la reflexión y la preparación, ahora es tiempo de actuar, porque paulatinamente se abrirán ciertos sectores. Mucho se ha dicho que no habrá vuelta hacia la normalidad, así que la adaptación y la flexibilidad serán claves para cualquier industria.
Veamos 3 grandes bloques económicos o comerciales en los que se pueden ubicar las empresas y negocios tras la pandemia: aquellas que fueron severamente afectadas, porque la contingencia los obligó a la parálisis y al depender del movimiento de las personas no pudieron hacer más; un sector intermedio que sí tuvo un decremento en su capacidad operativa, pero que a la vez se abrieron oportunidades, y finalmente los favorecidos porque todo este contexto propició mayores ventas o posicionamiento de algún producto o servicio.
Distintos objetivos para cada negocio
Obviamente las empresas, negocios o emprendimientos que se ubiquen en alguno de estos tres sectores presentan circunstancias distintas, necesidades concretas y objetivos nuevos. Si bien todos sufren los impactos de la pandemia en lo general por una economía en crisis y un poder adquisitivo a la baja, cada sector tiene sus retos y oportunidades.
Los favorecidos realmente no son tantos negocios, pero claro que los hay porque cubren necesidades inmediatas que la gente está buscando, precisamente por el contexto del Covid-19 como los productos de salud, accesorios de limpieza, los servicios de streaming y software que facilitan el trabajo remoto. Su objetivo es adquirir todo el mercado posible y su reto el mantenerse en posicionamiento una vez que las medidas de contingencia vayan disminuyendo.
Los más afectados negativamente es un espectro donde podríamos ubicar el mayor número de compañías e industrias, porque el movimiento de las personas y su poder adquisitivo es lo que mantiene esta base económica; pero claro que hay negocios que están más erosionados como todo lo que tiene que ver con eventos y entretenimiento, áreas de belleza como los spas o segmentos turísticos como hoteles y restaurantes. Este bloque antes que ver sus áreas de oportunidad está pensando en sobrevivir, es su objetivo y reto principal a la vez.
El bloque medio es interesante porque ha sido afectado por el contexto general de la contingencia, pero tiene a la vista oportunidades, como las escuelas privadas, la industria de la tecnología, los seguros, productos como albercas y juegos de mesa; aplicaciones de comida en casa o el sector legal. Su objetivo es detectar nuevas audiencias y su reto configurar otros servicios.
E-commerce y espacios digitales para todos
Estos objetivos marcan los terrenos hacia dónde hay que dirigir los esfuerzos para cumplirlos, no es lo mismo idear una estrategia para abarcar más mercado por parte de un fabricante de gel antibacterial a un salón de fiestas, cuya función es reunir gente, justamente una de las prohibiciones por contingencia; mientras un despacho legal que tenía más casos penales es el momento de apostarle a lo laboral porque hay muchos contratos no cumplidos por la crisis y puede hacerse fuerte si encuentra la forma de llegarle a esta nueva audiencia.
Para estos 3 espectros mencionados hay una vía en común con la que pueden cumplir dichos objetivos y generar las acciones para sobrevivir, adaptarse, encontrar oportunidades, crecer y consolidarse: tiene que explorar, reforzar o desarrollar su presencia digital.
Las acciones en la red no tienen restricción por la contingencia, es una inversión menor a lo físico y muchos esfuerzos requieren solamente de talento y estrategia. Actualmente todo sector o industria puede contar con un e-commerce u otras plataformas, en las que puedan vender sus productos o servicios. Asimismo, contar con espacios digitales como sitios, landing page, apps, redes sociales, blogs, ayudarán a los negocios a posicionarse en el mundo digital.
De esta forma, tanto los sectores afectados como los beneficiados por la crisis del Covid-19 encontrarán nuevas alternativas, con estrategias y herramientas que les permitan adaptabilidad y flexibilidad. Al igual que los objetivos son distintos, quizá no todas las acciones en digital sean para los 3 espectros, ahí es donde se requiere la parte estratégica del marketing.