Como cuentahistorias siempre me ha gustado escuchar a los demás, es la mejor forma de nutrirse de la información valiosa, para mí todos tienen algo importante qué decir y eso que nos digan seguro ayudará a alguien.
Una historia hace la diferencia y si tus historias ayudan a cambiar la vida, las emociones, el entorno de alguien, habrás hecho un gran trabajo porque las palabras son poderosas, inspiran, afectan y mueven.
Por eso es una gran responsabilidad el uso de las palabras, sea en tu vida cotidiana o como profesional.
Me apasiona escribir y comunicar, creo que toda mi vida he escrito, las letras han sido un respiro, un símbolo de libertad, mi mejor medio para expresarme, así que siempre repetía: Contando cuentos, CUENTAS. Siempre estás contando algo de ti, como vistes, como hablas, cuando te callas; los cuentos son historias, tu discurso, tu mensaje, tu manifiesto, tu vida misma es una GRAN historia; y por qué “cuentas” porque te das valía, te haces ver, te recuerdan, te aman.
Así nace Contando, CUENTAS, por esa frase que preferí dejar en dos palabras, ya que se infiere que al contar estás difundiendo “cuentos”. Un blog en el que hablaré de periodismo, redacción, comunicación, publicidad, marketing, productividad, emprendimiento, mindset, neuromarketing y alguno que otro tema más vinculado con estas áreas en las que me he desarrollado por más de dos décadas.